Casa o chalet independiente en venta en calle de Monteferro

Cada una de las viviendas que sus propietarios nos ofrecen son joyas, pero como en todo joyero, existen piezas más especiales y esta sin lugar a dudas en nuestro joyero es, con toda seguridad, la más brillante. Se trata de una propiedad singular, única por ubicación, vistas y precio. Desde nuestro origen hemos escuchado el manido debate de si ladera sur o ladera norte de Monteferro pero ¿para que tener que escoger si puedo tener las dos? Está singular propiedad es la «primera» que nace a faldas de este montículo de tierra y roca que se adentra en el mar casi 1,5 km y que ocupa una extensión de más de 100 hectáreas. Monteferro, que se eleva 147 metros, está ocupado por superficie forestal en la que destacan los pinos y los eucaliptos, contando con diversas rutas para el ocio y el deporte. Un enclave espectacular rodeado de mar, pequeñas calas y playas de arena fina como son las conocidas playas de Patos, Panxón y Playa América. La casa, construida con estructura de hormigón y tabiquería de ladrillo en el año 1983, se ubica sobre una parcela cuadrada con ligera pendiente de 1430 m2 aproximadamente. Se trata de una casa de dos plantas ideada como segunda residencia, y que necesitará de arreglos y adaptación si tu idea es convertirla en residencia habitual. Contamos con casi 100m2 en cada una de sus dos plantas, la primera dedicada a vivienda y la planta baja destinada a espacio de reunión familiar y garaje. En la actualidad, no existe una escalera que comunique interiormente la dos plantas aunque su realización es técnicamente posible. La planta primera, a la que se accede a través de unas escaleras, cuenta con un hall/distribuidor, un agradable salón-comedor con vistas panorámicas desde Cabo Estai (Vigo) al parador de Baiona; cuatro habitaciones y dos baños. Todas las estancias son exteriores y dos de las habitaciones cuentan con baño. En la planta baja se encuentra la cocina, un amplio espacio abierto de algo más de 50m2, ideal para la celebración de eventos, grandes comidas y festejos variados. Si la casa desde dentro te hace disfrutar, más aún lo hace la parcela, ajardinada, con árboles frutales y a los cuatro vientos, con opción de elegir según la hora del día, la temperatura y los vientos, cual es el mejor lugar para una comida, tomar el sol o simplemente jugar con tus hijos. Una casa única para toda la familia en una zona de mucho encanto. Le encantará vivir en ella. Llámenos para venir a verla sin compromiso.